“Si el teatro es drama y el drama es belleza, Irina Kouberskaya y Hugo Pérez han conseguido en esta insólita Bernarda cumbres de belleza turbadora […] han conseguido extraer la hermosura de esa tragedia sombría con exquisita sensibilidad […] Cuando tanto dinero se despilfarra en empresas fallidas, es admirable que en pequeñas salas como Tribueñe se rinda culto a la poesía y la belleza. Esto es teatro.” (Javier Villán en El Mundo).
“Montaje sorprendente en la pequeña y exquisita Sala Tribueñe. […] Músicas e imágenes que nos retrotraen a la España profunda, la misma en la que sucedieron estos hechos que, desde una gran imaginación y una sólida dramaturgia, recrean un grupo de magníficas actrices moviéndose brillantemente entre sugerentes simbologías que llevan al espectador a paisajes inesperados de mano del poeta, al que se ha respetado íntegramente.” (Rosana Torres en El País)